El maquillaje ha sido nombrado por los expertos como el noble arte de embellecer a las personas. Es una de las armas más fieles que tiene el ser humano para resaltar, más aún, su belleza. Utilizado sobre todo por mujeres, es una herramienta que ayuda a tapar todas aquellas imperfecciones del rostro. Su principal finalidad es resaltar los rasgos faciales y, si se utilizan técnicas sutiles, puede mejorar el aspecto de una forma muy natural.
Considerado uno de los elementos más importantes de la imagen, ofrece un mayor atractivo y aumenta la seguridad en uno mismo. Estas características fomentan una mejora de la autoestima.
La regla de oro en esta técnica imprescindible de la imagen personal es conseguir resultados naturales y armoniosos. Y, para poder lograrlo, es necesario tener en cuenta el tipo de rostro de cada mujer.
Maquillaje para cara redonda y ojos pequeños, embellecer una cara alargada o descubrir maquillaje para cara redonda y morena son algunos de los tips esenciales que te daremos para potenciar tu belleza según la forma de tu cara.
Maquillaje para cada tipo de cara
El maquillaje es una práctica que sigue modas y tendencias pero, para utilizarlo correctamente, es imprescindible identificar el tipo de rostro que se tiene. Emplear un método adaptado a tus facciones será la clave para conseguir resultados de ensueño.
¿Qué tipo de rostro tengo?
Seguramente que no te hayas parado a pensar en cómo son tus facciones. Sin embargo, conocer a fondo esta parte de ti te ayudará a la hora de elegir qué maquillaje para la cara es el más idóneo para ti.
Rostro cuadrado
Un rostro es cuadrado cuando la frente y la mandíbula tienen tamaños similares. En este caso, lo ideal es dar una base de maquillaje y resaltar el centro de la frente, el mentón y el bajo de los ojos. Aplica color oscuro en las mejillas y claro en los pómulos. Así podrás suavizar la dureza que presenta el semblante de tu cara.
Rostro ovalado
El tipo de rostro más armonioso y deseado. La base de maquillaje será difuminada uniformemente hacia el cuello. La técnica perfecta es utilizar el rubor desde los pómulos hacia la sien. Intensifica los labios con un color fuerte y equilibra con un discreto maquillaje de ojos con sombras neutras.
Rostro triangular
El rostro triangular destaca por su estrecha frente y ancha línea mandibular. Sácale partido suavizando sus marcados rasgos utilizando iluminador en la sien. La zona mandibular se verá menos estrecha con esta técnica. Escoge los colores más suaves.
Rostro redondo
En una cara circular el largo y el ancho son similares. Lo fundamental en el maquillaje para cara redonda es potenciar con colores parecidos al de la propia piel. Es decir, tonos similares en todas las partes menos en la sien, en los pómulos y en la mandíbula. Intenta dar más luz a tus ojos y labios para fijar las miradas en estas zonas.
Rostro alargado
Esta forma facial está caracterizada por tener la frente o la barbilla alargadas y los pómulos altos. Extiende la base con tu tono por todo el rostro menos por la frente y la barbilla, donde tendrás que emplear un color más oscuro. Intenta oscurecer, también, la parte inferior de la nariz. Destacar tus labios, ojos y pómulos permitirá que tu cara se vea más redonda.
Maquíllate con técnicas delicadas y recuerda que menos es más.
