La infancia de los más pequeños de la casa es uno de los periodos que más disfrutan los padres. Sin embargo, esta etapa de la vida de nuestros hijos pasa más rápido de lo que imaginamos. Cuando nos queremos dar cuenta ya están yendo solos al colegio sin necesidad alguna de acompañarlos y darles la mano.
Bien sabemos que una buena cámara fotográfica con la que inmortalizar los mejores recuerdos es el sueño de cada padre cuando pasan por la tienda de fotografía del centro comercial.
Si eres de esos padres que se aferran a la idea de guardar los momentos más memorables de cada etapa de la vida de sus niños, saber cómo guardar recuerdos de tus hijos de forma creativa será tu mejor opción. ¡No pierdas detalle de lo que te contamos!
Guarda los mejores recuerdos de tus hijos
Además del típico calendario y álbumes de fotos, necesitarás un bonito baúl en el que guardar todos y cada uno de los súper recuerdos más memorables..
Prueba de embarazo
Muchas parejas viven con mucha intensidad el momento en el que saben que van a ser padres. Por ello, todos los que pertenecen a este grupo sienten gran ilusión por guardar el test de embarazo con el que se enteraron de que su vida iba a cambiar por completo.
Ecografías del bebé
Las fotos son la mejor forma de recordar y, en el caso de un embarazo, no hay mejor forma de recordarlo que la primera foto del bebé.
Ese es el motivo por el que las ecografías suelen ser las primeras fotos de todos los álbumes familiares, seguidas de fotos de padres e hijos.
Guarda la primera ropa que le pusiste
Guardar la primera ropa que se le puso al bebé es de lo más nostálgico que suelen hacer los padres. Su primer body, sus primeros calcetines o, incluso, los primeros zapatos que utilizaron.
Cuaderno con fechas importantes
Anotar las fechas importantes en las que nuestros hijos lograron sus primeros hijos siempre fue una gran tendencia.
La primera vez que anduvieron, la primera vez que montaron en bici o, incluso, la primera vez que comieron verdura son momentos para no olvidar.
Caída del primer diente
Aunque pueda parecer extraño, son muchos los padres que decidieron utilizar el primer diente que se le cayó a sus hijos para hacerse un bonito colgante.
Manta favorita
Guardar la manta o la toquilla favorita de los más pequeños de la casa es una buena forma de recordar qué era lo que, por entonces, ayudaba a tu bebé a que se calmara.
Peluche preferido
Ese peluche preferido con el que tu niño iba a todos los lados es una de las cosas que sí o sí necesitas guardar en tu baúl de los recuerdos.
Dibujos
Estamos seguros de que guardar todos los dibujos que te hacen tus hijos a lo largo de su niñez es totalmente imposible. Lo que sí puedes hacer es escoger los más emotivos para ti.
Con todos estos recuerdos bajo una bonita caja de madera no podrás olvidar ni uno de los momentos más especiales de la infancia de tus pequeños.
